La Fuente

La fuente de la plaza cívica era una de las pocas cosas que me atraía de la ciudad cuando era chica. Era rara, o quizá para mi mente de infante era algo no usual. Estaba buena. Esperaba como estúpida el momento en el cual pasaba en frente de ella cuando era de noche. Apoyaba mi cara en el vidrio del auto y la miraba idiotizada. No sé que me atraía, porque ahora con unos años mas encima me doy cuenta q no es mas que un par de chorros de agua con unas lámparas que le dan el efecto de color todo metido adentro de un gran piletón, pero a mi me gustaba. También me gustaba pasar al lado de ella caminando y que los chorritos me salpicaran un poco la cara. Vaya uno a sabe que provocaban en mi mente ingenua esas insignificantes gotas, la verdad no recuerdo, pero me encantaba. Con el paso del tiempo, la fuente como tantas otras cosas se fueron alejando de mi interés, y ya ni siquiera me acordaba de ella, salvo en las estudiantinas de primavera cuando algún borracho se caía adentro y me cagaba de risa. Hasta que el otro día pase por un kiosco a comprar cigarrillos. Mientras esperaba que el kiosquero terminara de sacarle unas fotocopias a un cliente, me puse a observar las cosas, y encontré unas postales a la venta como recuerdo de la ciudad con fotos de los lugares más significativos: la Iglesia Cristo Rey, la Catedral, la estatua de San Francisco de Asís, la de Iturraspe (siempre con pájaros en la cabeza jaja) y..... la fuente!. Pero la fuente de antes, con los chorritos de distintos colores formando círculos toda iluminada en la noche. La fuente que a mi me idiotizaba. Y en ese momento me di cuenta de que nunca más la había vuelto a ver prendida. Una tarde cuando pasaba por los alrededores de la plaza me acerqué y me puse a mirarla. Lo único intacto es el piletón, hoy en día utilizado como asiento por todos, pero todo lo demás estaba en ruinas, las lámparas rotas rodeadas de un cablerío asqueroso y todo pelado y los palitos ( no se como carajo se llaman) todos oxidados y rotos. Y me dio tristeza che!. La plaza cada vez está más abarrotada de bultos de personas que sinceramente no conozco y que cada dos por tres tienen flores (obviamente con un cartel que dice que el que las colocó fue nuestro intendente) a sus pies por aniversarios vaya uno a saber de que. Pero la fuente sigue así, siempre arruinada. No sé porque escribo esto. Quizá porque me gustaría volver a verla encendida o porque me da bronca que ahora tenemos colectivos pero nadie nunca se acuerda de la fuckin fuente!. Como lo demostraban las postales del quiosco (dicho sea de pasa ¿quién carajo se quiere llevar una postal de recuero de esta ciudad? Pero bueh), la fuente es un símbolo de la ciudad, y quizá también lo es para gente, que como yo cuando era chica la miraban como pelotudos. Bueno no sé, la verdad a mi me gustaría volver a verla encendida, con los chorritos de colores y todo!!!!!.